EL FIN DE LA INTERVENCION.
Como a principios de abril el conflicto parecía estar
próximo a su fin, los mandos de la OTAN empezaron a considerar la invasión por
tierra de Kosovo, pero debido a que el entonces presidente de los Estados
Unidos Bill Clinton no estaba de acuerdo, y a que las negociaciones de
fineses y rusos con el presidente serbio para que se rindiese aún seguían en
pie no se llevó a cabo.
El 4 de
junio de 1999, Slobodan Milosevic acepta un plan internacional sobre Kosovo que
prevé el cese inmediato de la violencia y el despliegue de una fuerza de paz
internacional así como el regreso de los refugiados y la obtención del estatuto
de autonomía para Kosovo, que quedaría bajo administración de la ONU. El 10 de
junio, las fuerzas yugoslavas inician su retirada de Kosovo y la OTAN suspende
los bombardeos aéreos.